The ‘Euskal Artzainainak Ameriketan Museoa’ (Museum of Basque Shepherds in America), which was inaugurated in Elgorriaga, in the interior and exterior of the renovated mill of the town.
El ‘Euskal Artzainainak Ameriketan Museoa’ (Museo de los Pastores Vascos en América), inaugurado en Elgorriaga, en el interior y exterior del renovado molino de la localidad.
The museum is a testimony of the special relationship that Basque emigrants have maintained in the 19th and 20th centuries with the Western United States and to preserve their knowledge and memory, giving an account of the reality and the way of life of Basque shepherds in North America to both locals and visitors.
Emigration to the United States, to work there as shepherds in the mountains and plains of the West, has been a close and present possibility in many villages, hamlets and families of the Navarrese mountains from the mid-nineteenth century until the last third of the twentieth century.
That is over. There is no more emigration. The blood is not renewed. And this motivated the emergence of entities such as the Navarre association ‘Euskal Artzainainak Ameriketan’ (Basque Shepherds in America) with the aim that this part of our history, so deeply rooted in many of our regions, is not lost and that its knowledge is preserved and disseminated, as well as recognizing its protagonists for their role and contribution, both in their original communities and in the receiving ones, promoting initiatives.
The museum will be open on weekends, although schools that might be interested can also request visits during the week.
Dar testimonio de la especial relación que emigrantes vascos han mantenido en los siglos XIX y XX con el Oeste de los Estados Unidos y preservar su conocimiento y su memoria, dando cuenta de la realidad y del modo de vida de los pastores vascos en Norteamérica tanto a propios como a visitantes es el objetivo que se ha trazado el ‘Euskal Artzainak Ameriketan Museoa’ (Museo de los pastores vascos en América) que se inauguró en Elgorriaga, en el interior y exterior del remozado molino de la localidad.
La emigración a EEUU, para trabajar allí como pastores en los montes y llanuras del Oeste, ha sido una posibilidad próxima y presente en muchos pueblos, caseríos y familias, de la montaña navarra desde mediados del siglo diecinueve hasta el último tercio del siglo veinte.
Aquello acabó. Ya no hay emigración. La sangre no se renueva. Y esto motivó el surgimiento de entidades como la asociación navarra ‘Euskal Artzainak Ameriketan’ (Pastores vascos en América) al objeto de que esa parte de nuestra historia, tan arraigada en muchas de nuestras comarcas, no se pierda y se preserve su conocimiento y se difunda, además de reconocer a sus protagonistas su papel y aportación, tanto en sus comunidades originarias como en las receptoras, promoviendo iniciativas.
El museo abrirá sus puertas los fines de semana, aunque las escuelas que pudieran estar interesadas pueden solicitar visitas también entre semana.